Suaves y fragantes, vegetarianas y deliciosas, las albóndigas de berenjena con su inconfundible sabor te conquistarán al primer bocado.
Además de sabrosos, son muy ligeros: no es necesario utilizar grasas en la cocción, y también son excelentes en frío.
Antes de pasar a los ingredientes y el procedimiento, descubramos más sobre la berenjena, esta verdura con múltiples propiedades.
Información nutricional de la berenjena
La Solanum melongena L., comúnmente llamada "berenjena", es una planta angiosperma dicotiledónea perteneciente a la familia de las solanáceas. Probablemente nativo del sur y este de Asia.
El 92% está compuesto por agua, el 3,4% es Fibras y el resto incluye proteínas, azúcares y trazas de lípidos.
La berenjena es particularmente baja en calorías, aportando solo 24 calorías por cada 100 g.
La melanzana è una preziosa fonte di minerali in particolare: potassio, magnesio e calcio, ma anche rame, zinco, ferro e fosforo.
Es rico vitaminas como A, B1, B2, B3, B5, B6, C, E y K . También contiene los aminoácidos alanina, arginina, cistina, tirosina, glicina y fenilalalina.
Propiedades de la berenjena
Las berenjenas realizan una importante acción depurativa y drenante gracias a la abundante presencia de potasio.
Es una fuente beneficiosa para la salud ósea ya que es rica en hierro y calcio.
Aporta numerosos beneficios al sistema gastrointestinal . La Fibras contenida en particular en la parte externa y más coriácea de la berenjena, ayuda a la motilidad intestinal y contrarresta el estreñimiento y el estreñimiento abdominal, y es un aliado válido en la regulación del cortisol.
En algunos países, la berenjena se usa a menudo como laxante natural en caso de estreñimiento.
También tiene fuertes propiedades antioxidantes y numerosos beneficios para el sistema cardiovascular .
Consejos útiles
No se recomienda consumirlo crudo porque contiene solanina, sustancia tóxica que se elimina / reduce con la cocción.
En el momento de la compra, se prefieren las berenjenas ya que tienen un color uniforme y una consistencia dura y compacta.
Se pueden conservar en el frigorífico durante una semana y no se recomienda retirar el tallo antes de la preparación.
Ingredientes
- 2 berenjenas grandes (260 g cocidas)
- 1 huevo
- 70 g de pan
- 10 g de aceite de oliva virgen extra
- 10 g de queso parmesano
- 100 ml de leche
- Pepe
- Sal
- Polvo de ajo
- 20 g de copos de avena Jumbo
- 20 g de pan rallado
Procedimiento
- Lavar las berenjenas, cortarlas en dados y cocinarlas en el microondas a 900 W durante 12 minutos o en una cacerola con 50 ml de agua y tapa hasta que estén blandas.
- Cortar el pan y poner las rebanadas a remojar en el bol con la leche.
- Una vez fría, poner en un bol las berenjenas y añadir el huevo, las especias, la Sal, el parmesano, el aceite y finalmente el pan bien exprimido.
- Con una licuadora de inmersión, licúe 2/3 de la mezcla. Agrega las hojuelas de avena y el pan rallado.
- Cubre la superficie del bol con film transparente y déjalo reposar en el frigorífico durante al menos 3 horas.
- Formar las albóndigas y cocinar por ambos lados en una sartén antiadherente (3 minutos por lado).
Las albóndigas de berenjena se pueden comer en el lugar o disfrutar frías. Se pueden guardar en el frigorífico en un recipiente hermético durante tres o cuatro días.
Conclusión
Preparar sabrosas albóndigas de berenjena con bajo contenido de grasas y calorías es realmente sencillo. Los copos de avena, que absorben la mayoría de los líquidos contenidos en la masa, te permiten utilizar menos ingredientes y ayudan a que el sabor final de estas albóndigas sea delicioso.